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¿Quién no tiene una red social? Es común entrar a Instagram y ver a modelos o influencers con la piel perfecta sin ningún poro o con el cabello sedoso que parece de película.

Muchas veces eso nos hace cuestionarnos ¿Por qué yo no soy así? Pues es el momento indicado para recordarte que lo que vemos en redes sociales muchas veces es producto de una buena pose, edición y filtros. Y si de pronto son así realmente, no debes compararte con ellas, pues cada mujer es única y tiene su propia belleza. Además, resulta difícil compararse para llegar a alcanzar estándares que inventan las personas. Por eso, la forma o el camino más libre a seguir es ser tú misma, sin comparaciones.

Aceptar nuestro cuerpo, es una forma de amor propio, cambia la manera en la que nos relacionamos con nosotras mismas y nos hace llenarnos de seguridad y confianza. Aunque no lo creas es muy normal tener estrías, acné, rollitos, manchitas; ¡muchas mujeres en el mundo las tienen!

Cada uno de esos aspectos hacen únicos a nuestros cuerpos. El camino de la aceptación no es para nada fácil y aún menos cuando diariamente estamos expuestos a estos estándares de belleza inalcanzables y que a veces resultan hasta absurdos.

Un súper tip es un momento de detox de redes sociales para evaluar qué tipo de contenido sigues y si realmente te aporta en el proceso de construir la mejor versión de ti misma. Este detox digital implica desconectarnos de las redes sociales y si puedes de los aparatos tecnológicos. Aunque las redes sociales no son malas, a veces es bueno desconectarnos un poco de ellas, pues nuestras vidas son más que las redes sociales.

Empecemos a aceptarnos y a querernos tal cual somos, cada una de nosotras brilla diferente y eso nos hace especiales. Y por si se te olvidó, eres una persona muy poderosa y hermosa, la única aprobación que necesitas para ser realmente quien eres, es solo la tuya. Te mando un abrazo lleno de Loving, gracias por leer.

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