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¿Alguna vez te ha pasado que conoces a un chico súper especial para ti? Ese tipo de chico que a simple vista parece tenerlo todo: cabello perfecto, lindos labios, buen físico, en pocas palabras, es como si vieras a Zac Efron parado frente a ti. Pero después de conocerlo bien, te das cuenta que es tan tóxico como el lago donde Homero Simpson botaba los desechos de donde trabaja (si no lo ubicas, en el lago hay peces de 3 ojos) ¡uhg! A esta clase de chicos, yo los denomino "Los Chernóbil".

Este tipo de chicos son los que te buscan peleas sin sentido, por ejemplo ¿hablaste con un chico 3 meses antes de conocer al Chernóbil? ¿Ese chico te dijo que eres hermosa? ¡bum! Tienes una pelea de celos, con el típico "¿así que hablas con otros chicos? ¿Por qué te dejas coquetear de cualquiera?" Y así, hasta que en tu cabeza sólo escuchas bla, bla, bla.

Te cuento esto porque estuve mucho tiempo en una relación así. Algo que me hacía en repetidas ocasiones, era que él podía entrar en cualquier momento en mi celular, pero apenas yo tocaba el suyo, se enojaba como si hubiera roto una botella de whisky de las súper caras. ¿Y qué creen que pasó al final? Me engañó con la ex novia de su mejor amigo que a mi me dijo que era "solo su amiga" (inserte enojo de risa con lágrimas aquí).

Así que, consejo de vida, si conocen a un chico que es demasiado bueno para ser cierto, tengan cuidado, podría ser la toxicidad en persona. A veces es mejor quedarse con el que es muy buena onda, y siempre se muestra tal cual es. Además, si se quedan con el de más cuerpo, tendrán alguien que las caliente en el invierno y que se rajara por calentarlas todo el año. Ahí nadie pierde. ¡Fin!

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